Antes de hablar de Saw 8: Legacy, volvamos atrás en el tiempo. Hace ya doce años, una pequeña película dirigida por James Wan y escrita por Leigh Whannell asombraba a propios y extraños en su pase por el festival de Sundance. Nacida al calor de un cortometraje, la Saw original gustó tanto a Lionsgate que el estudio apostó por un gran estreno en salas comerciales (la idea era lanzarla directamente a vídeo). Así, nació una de las franquicias más longevas -y rentables- de los últimos tiempos gracias a las secuelas (siete, la última en tres dimensiones), los videojuegos, el merchandasing y las numerosas atracciones de terror que dieron jugosos beneficios. Más de 873 millones de dólares, para ser exactos.
Tras un descanso de cinco años y miles de rumores, Lionsgate ha decidido reactivar la franquicia con un nuevo episodio: Saw 8: Legacy, que estará escrito por Josh Stolberg y Pete Goldfinger, guionistas de Hermandad de Sangre (Sorority Row), Piraña 3D y Piraña 3DD.
Aún es pronto para conocer detalles de la historia, aunque el final de Saw 3D (no muy cerrado que digamos) invitaba a continuar la franquicia. Wan, que estará ocupado dirigiendo Aquaman para Warner, se limitará a las funciones de productor ejecutivo junto a su socio Whannell.
¿Será Saw 8: Legacy el inicio de una nueva tanda de secuelas a estrenar en Halloween, para no perder la costumbre que tomó Lionsgate?
