Continuamos con nuestro periplo por el festival de Sitges. Acompañadnos en los resúmenes de los días 2 y 3.
Festival de Sitges, 7 de octubre:
A las 11.30h daba comienzo Samsung Sitges Cocoon Panel: Virtual Reality and the Cinema of the Future, una interesante charla sobre el presente y futuro de la realidad virtual. Alexandre Aja, Robert Englund, Jaume Balagueró y Mike Hostench compartieron sus opiniones, dudas y alabanzas hacia un formato al que todavía le queda un largo trecho por recorrer.
THE BAD BATCH (AMOR CARNAL)
Desterrada a un páramo de indeseables, una joven trata de salir adelante entre la comunidad del desierto, asolada por las drogas, y un enclave de caníbales.
Ana Lily Amirpour vuelve a demostrar su capacidad para sacudir al espectador en su segunda película (somos muy fans de la primera, Una Chica Vuelve a Casa Sola de Noche). Más accesible que su película de vampiros, Amirpour nos regala en The Bad Batch un viaje difícil de olvidar, que encaja a la perfección en los tiempos que nos ha tocado vivir.
MOM AND DAD
Una misteriosa epidemia en forma de locura masiva provoca que los padres ataquen violentamente a sus hijos. Carly y Joshua tratarán de sobrevivir durante tan aciaga jornada, amenazados por unos progenitores que poseen los rasgos de Nicolas Cage y Selma Blair.
Esta bomba de relojería llamada Mom and Dad surge del feliz encuentro entre el director de Crank: Veneno en la Sangre y un Nicolas Cage convertido en carne de meme, amén de una premisa loquísima que funciona gracias a la frenética dirección y edición vista en las películas de Jason Statham. Aunque al final se desinfle por sus excesos, fue una de las películas más aplaudidas del festival.
THE ROCKY HORROR PICTURE SHOW
Un matrimonio joven y puritano se pierde en una noche de tormenta y llega al castillo de Frank-N-Furter, un científico travestido que acaba de idear una criatura, Rocky, para el propio placer sexual. La etiqueta de culto se inventó para esta transgresora película, plagada de canciones memorables.
La experiencia del año. Todo el Auditori se volcó en este legendario pase (a las dos de la mañana) que empezó con la entrega del Gran Premio Honorífico a Susan Sarandon. Antes de retirarse a descansar, la actriz se animó a cantar un fragmento de Over at the Frankenstein Place con el público, quien no dudó en bailar, cantar, reír y pasárselo de miedo con el grupo de animadores liderados por la gran Itziar Castro. Lo dicho: legendario.
Festival de Sitges, 8 de octubre:
CAMPFIRE CREEPERS
Cuando Sam y su novio roban caramelos de un campamento abandonado en el bosque, despiertan enterrados hasta el cuello y cara a cara con el coleccionista de calaveras.
Aunque a la realidad virtual le falte mucho camino que recorrer todavía, Alexandre Aja ha hecho los deberes en esta versión sin acabar del primer camino de Campfire Creepers. Sus efectos inmersivos, todavía sin acabar en la versión que vimos, nos hizo sonreír de oreja a oreja. Y la presencia de Robert Englund siempre es un plus.
NIGHT NIGHT
Cuando la madre de nuestro pequeño protagonista abandone la habitación en la que se encuentra, los peores temores del niño se harán realidad.
El miedo a los payasos (o coulrofobia) es el motor de este cortometraje en realidad virtual que pese a sus buenas intenciones no deja de ser una colección de jumpscares bastante imprevisibles. Lo mejor: el mundo oscuro en el que somos arrastrados a través del armario.
A las 16:30h no quisimos perdernos una mesa redonda llamada El fantàstic espanyol: cinema en expansió (El fantástico español: cine en expansión), que contó con la presencia de los directores Jaume Balagueró, Paco Plaza, Carlos Vermut y Mar Targarona. Un muy interesante debate sobre la situación actual del séptimo arte que generó más de una .
CREEP 2
Sara es una videoartista cuyo objetivo principal es crear intimidad con hombres solitarios que encuentra en Craigslist. Después de ver un anuncio en internet que decía «trabajo de vídeo», va hasta una casa en medio del bosque para conocer a un cineasta que dice ser un asesino en serie. Ella lo ve como una oportunidad para crear algo artístico y accede a pasar un día entero con él, pero en realidad no sabe dónde se está metiendo.
A la primera Creep le tenemos mucho cariño por diferentes razones (sin ir más lejos, fue nuestra primera película vista en Sitges 2014); la idea de una secuela nos daba algo de vértigo, pero el hype estaba ahí. Creep 2 no supera a su predecesora, pero la expande y la completa gracias a un enorme Mark Duplass, a quien respalda la excelente Desiree Akhavan. Tenemos muchas, muchas ganas de ver la tercera entrega.